Inmigración
Gobierno de Trump suspende el “parole” y la reunificación familiar
Se suspenden los procesos de beneficiarios del ‘parole’ y la reunificación familiar. Afecta a las personas que entraron al país de manera legal, y ahora se sumarán a un limbo migratorio. Primero se suspendió el Estatus de Protección Temporal (TPS, por sus siglas en inglés) que amparaba a unos 300.000 venezolanos, ahora peligra el curso de los procesos migratorios de los que llegaron al país mediante programas de reunificación familiar.

Por Julieta Pinzón
Marzo 2025
El 14 de febrero, el gobierno ordenó la puesta en pausa de todas las solicitudes de inmigración presentadas por nacionales de América Latina y Ucrania, que entraron al país de manera legal beneficiados con ciertos programas migratorios. Las personas que pensaban regularizar su estatus, presentando casos de asilo político, a través de amparos familiares o acogiéndose a algún tipo de ley que les permita el camino a la residencia, quedan completamente imposibilitados de seguir adelante con sus procesos. Andrew Davidson, de los Servicios de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS), ordenó la “pausa administrativa” de todas las “solicitudes de beneficios pendiente” en la agencia, que opera bajo el mando del Departamento de Seguridad Nacional (DHS). Se trata, aparentemente, de una suspensión temporal e indefinida.
Son tres los programas cuyos beneficiarios permanecen afectados: el de parole humanitario, que permitió la entrada de un total de 530.000 nacionales de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela bajo el Gobierno de Biden; el programa de reunificación familiar para colombianos, ecuatorianos, centroamericanos, haitianos y cubanos que podían acceder a la residencia a través del vínculo con familiares naturalizados en Estados Unidos; y el programa Unidos por Ucrania, que ofreció refugio a unos 240.000 ucranianos con patrocinadores estadounidenses.
El fraude es el motivo por el que frenaron estos programas. Tildaron al de parole de “ilegal”, de “un desastre plagado de fraudes”. La pausa en los procesos migratorios llega porque la “información sobre el fraude y la seguridad pública o las preocupaciones de seguridad nacional no están siendo debidamente señaladas en los sistemas de adjudicación de los USCIS”. Hay solicitudes con “patrocinadores en serie”, información de personas fallecidas o direcciones idénticas usadas por un mismo beneficiario y que algunos a quienes se le permitió la entrada al país no fueron investigados completamente. Esta medida podría ser levantada cuando se lleve a cabo una “revisión y evaluación exhaustiva en el país de los extranjeros que son o fueron puestos en libertad condicional en el país en virtud de estos programas”.
Se desconoce qué sucederá en adelante con las personas que tienen protección y permiso de trabajo por dos años, y que aspiraban a alcanzar algún tipo de estatus legal, como es el caso de los cubanos, que luego de un año de permanencia en el país pueden beneficiarse con la llamada Ley de Ajuste y la consecuente obtención de la Tarjeta Verde. El DHS contemplaba revocar el estatus legal a las personas que Biden permitió entrar al país con parole, las mismas que ahora podrían someter a un proceso de deportación si no han solicitado, u obtenido, otro beneficio de inmigración. Esta medida impide a los migrantes solicitar una residencia permanente, el asilo y algún estatus que le garantice su permanencia en el país.
Con el programa de parole humanitario, cada mes entraban al país hasta 30.000 extranjeros Por eso lo eliminaron una vez tomaron el poder de la Casa Blanca, lo mismo hicieron con la aplicación de CBP One y más tarde con el TPS, argumentando que era “contrario a las políticas de Estados Unidos”.