El Anunciante FL

Latino Pets

¿Quien se enferma más: un perro o un gato?

Perros y gatos, son propensos a diversas enfermedades. Sus predisposiciones a ciertos problemas de salud varían debido a sus diferencias biológicas, genéticas y de estilo de vida. Te detallo algunas comparaciones entre perros y gatos en cuanto a las enfermedades más comunes y su propensión a enfermarse.
Por Julieta Pinzón Junio 2025
Lo primero a tener en cuenta es que las mascotas, al igual que nosotros, son seres vivos, por lo que están también expuestas a tener enfermedades. Esto lo deben evaluar todas aquellas personas que estén considerando darle la bienvenida a un nuevo peludo a su hogar, ya que al tomar esta decisión deben ser conscientes de que adquieren una responsabilidad durante toda la vida de esa mascota o “hasta que la muerte los separe”, tanto en la salud, como en la enfermedad. Cabe mencionar, que una de las causas más frecuentes de abandono en perros y gatos de compañía, especialmente de edad avanzada o mayores de siete años, es la falta de recursos, tiempo y paciencia para acompañar a la mascota en medio de una enfermedad. Sin embargo, una de las formas de combatir esta situación es generar conciencia frente a la adopción responsable.
1. Enfermedades comunes en perros. Los perros tienden a tener ciertas predisposiciones a enfermedades que están relacionadas con su tamaño, raza y genética. Algunas de las condiciones más comunes en perros incluyen:
Enfermedades cardíacas: Algunas razas de perros, como los Bulldogs, los Doberman y los Cavalier King Charles Spaniel, son más propensas a sufrir enfermedades cardíacas como la insuficiencia cardíaca congestiva y la enfermedad valvular.
Artritis y problemas articulares: Las razas grandes, como los Labrador Retriever y los San Bernardo, tienen una mayor probabilidad de desarrollar displasia de cadera o artritis a medida que envejecen.
Problemas respiratorios: Razas braquicéfalas (como los Pugs, Bulldogs y Shih Tzus) son más propensas a desarrollar problemas respiratorios debido a su estructura facial.
Enfermedades gastrointestinales: Los perros pueden ser más propensos a sufrir trastornos digestivos como diarrea o infecciones bacterianas, especialmente si tienen una dieta inadecuada o comen cosas que no deberían.
Infecciones parasitarias: Los perros tienen más contacto con otros animales y el ambiente exterior, lo que los hace más susceptibles a infecciones por parásitos como garrapatas, pulgas, lombrices intestinales, y parvovirus.
2. Enfermedades comunes en gatos. Los gatos son animales generalmente más saludables que los perros, pero también tienen una serie de problemas de salud comunes. Las enfermedades más frecuentes en gatos incluyen:
Enfermedades renales crónicas: Los gatos son más propensos a desarrollar insuficiencia renal crónica, especialmente a medida que envejecen. Esta es una de las enfermedades más comunes entre los gatos mayores.
Problemas dentales: Los problemas dentales son muy comunes en gatos, sobre todo en aquellos que no reciben cuidados dentales regulares. La gingivitis y la enfermedad periodontal pueden afectar a muchos gatos.
Enfermedades del tracto urinario: Los gatos, especialmente los machos, son propensos a desarrollar problemas urinarios como cistitis, cristales urinarios y obstrucciones del tracto urinario, que pueden ser graves.
Hipertiroidismo: Este trastorno metabólico es común en gatos mayores y puede provocar una variedad de síntomas, como pérdida de peso, aumento del apetito y aumento de la actividad.
Leucemia felina (FeLV) y virus de inmunodeficiencia felina (FIV): Aunque no son tan comunes, los gatos pueden infectarse con estos virus, que afectan su sistema inmunológico y pueden resultar en enfermedades graves.
En términos generales, los perros tienden a tener una mayor propensión a enfermedades debido a su exposición a una mayor variedad de factores ambientales (contacto con otros perros, parques, enfermedades infecciosas, etc.), sus diferencias de tamaño y raza, y los trastornos genéticos asociados con razas específicas. Además, algunas enfermedades infecciosas, como parvovirus y moquillo, afectan principalmente a los perros.
Por otro lado, los gatos tienden a ser más independientes y menos propensos a enfermedades infecciosas. Sin embargo, son vulnerables a condiciones relacionadas con el envejecimiento, enfermedades renales y problemas urinarios. También, las enfermedades virales como la leucemia felina o el VIH felino son más prevalentes en gatos que en perros.
Sin embargo hay varios factores a considerar, al momento de determinar su mayor o menorexposición para enfermarse:  
Estilo de vida: Los gatos suelen tener un estilo de vida más sedentario y en interiores, lo que reduce la exposición a enfermedades infecciosas, mientras que los perros suelen ser más activos, socializando con otros animales.
Atención veterinaria: Los gatos son más propensos a esconder síntomas de enfermedades, lo que puede hacer que algunos problemas se detecten tarde. En cambio, los perros suelen ser más evidentes cuando están enfermos.
Razas y genética: Tanto en perros como en gatos, la genética juega un papel importante. Las razas puras son más propensas a enfermedades hereditarias, como las displasias de cadera en perros grandes o las enfermedades cardíacas en algunas razas de gatos.
Aunque los perros en general tienen más probabilidades de desarrollar enfermedades debido a su mayor exposición a factores externos y las predisposiciones raciales, los gatos no están exentos de riesgos de salud. Ambos requieren cuidados preventivos y atención regular para detectar cualquier signo de enfermedad a tiempo.
Por lo tanto, es importante llevar tanto a perros como a gatos al veterinario regularmente y prestar atención a su salud general, independientemente de si parecen estar enfermos o no.